Israel volvió a bombardear este miércoles, por segundo día consecutivo, un campamento de refugiados palestinos del norte de la Franja de Gaza, que dejó "decenas" de muertos, según el movimiento islamista Hamas, y que la ONU calificó de "la última atrocidad que golpea a la población de Gaza".   El Ministerio de Salud de Hamas dijo que el nuevo ataque contra el campamento de Jabaliya, el más grande del enclave palestino, alcanzó edificios residenciales y dejó "decenas de mártires y de heridos".   Imágenes transmitidas por AFP muestran enormes destrucciones en el lugar y los socorristas aseguraron que "familias enteras" murieron en el bombardeo, aunque por el momento no existe un balance independiente del número de víctimas.