Una gobernanza adecuada de la información y los datos estatales, con un intercambio fluido entre las diferentes áreas de la Administración Pública Nacional y entre ésta y las provincias y municipios, redundaría en importantes beneficios económicos y fiscales, que en el orden internacional fueron estimados por el Foro Económico Mundial en aproximadamente el 1,5% del PBI.   Los avances alcanzados en ese aspecto tienen aún varios obstáculos que superar, tanto en algunas normas y protocolos de diferentes áreas como en cierta renuencia de funcionarios y niveles de la administración por compartir la información y coordinar los datos de una manera homogénea, para facilitar su acceso tanto para la toma de decisiones públicas como para su uso por parte de la sociedad civil.   Ante esa situación, el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec) y la organización civil Fundar dieron a conocer un "manifiesto", en el que instan a "impulsar un diálogo sobre cómo optimizar el uso de datos en la administración pública", para que la discusión "no sea un tema de 'nich o'".